Teníamos pendiente el regalo al peque de unos amigos y con el jaleo que afortunadamente he tenido últimamente con las camisetas, sacar hueco para hacerle una Camilena era algo bastaaante complicado.
Pero es que además me apetecía regalarle algo distinto y....que fuera muy práctico (porque es el segundo hijo y ambos hermanos han nacido en la misma época del año por lo que comparten armario y todo lo demás).
Después de darle bastante vueltas al coco me acordé de la opción de una tarta de pañales...y decidí buscar imágenes hasta dar con un diseño que me encajara...
No os voy a contar el proceso completo...porque fue para darnos un patatús. Mi marido y yo enfrascados mirando fotos para ver cómo se hacía el aparetejo y cómo nos la apañábamos con las cosas que contábamos. Pa habernos grabao!!!
En fin, creo que el objetivo estuvo medio conseguido porque los papis nos comentaron que les había encantado...y además sorprendido. Y no me extraña. No todos los días le regalan a uno algo así (empeño le pusimos desde luego :-D)
Aquí intentando dar forma a las ruedas:
El saco de dormir que incluimos en el regalo (madre mía qué arrugado se ve!!)
Y aquí el resultado casi final (porque hicimos unos retoques y ya os mandaré la foto de cómo quedó). El faro fue un biberón que incorporaba una tetina de adaptación, el guardabarros un babero hecho por mí con la tela de los piraras, varias mantitas de microfibra que son útiles para muchas cosas, el saquito en plan asiento...y los guantes de lana para acelerar...rummmm....rummmmmm
En fin...entre col y col...una moto de pañales :-D
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